miércoles, 28 de abril de 2010

En la terminal del ADO...

Ahí sentada en la sala de espera del ADO, con muchas ganas de esperar no sé qué, o tal vez esperando nada, pero ahí, ahí estaba yo. Con mis audífonos enchufados de mi oreja hasta mi móvil, escuchando las canciones que me gusta oír cuando estoy sola. Puede darme cuenta que me estoy quedando en un reloj de arena que no avanza, que mi mente se estanca en mi infancia. No sé como olvidar, no sé como avanzar.

Eran las 4 AM y ahí en la Terminal del ADO, esta yo, solo yo, con un montón de salobre que corrían en mis mejillas, y no me daba cuenta de que lloraba, solo oía a lo lejos que alguien cantaban “…Cuando ya de tu orgullo, no te quede ni gota/ y la luz de tus ojos se comience a apagar;/ hablaremos entonces del amor de nosotros/ y sabrás que mis besos, los que tanto desprecias/ van a hacerte llorar…”.

Al escuchar la siguiente salida, reaccioné, y puede darme cuenta de la locura que me envolvía, que estaba sentada en la Terminal del ADO, pensando en ti. Solo esperaba a que amaneciera, para poder partir de ahí, pero me gustó la madrugada y la sala de espera en dónde en realidad nadie espera nada, —me gustó— para pensar más en ti.

Ahí en la Terminal del ADO, estaba yo, sin boleto, sin destino, sin ningún andén en donde abordar un autobús que tuviera por destino tu olvido. Estaba sentada recordando mis momentos contigo, como una película en mi cabeza pasaban esos años a tú lado, y lloraba, mucho lloraba porque poco falta para que olvides mi nombre, cuando yo no puedo olvidar ni un cabello tuyo. El reloj pasaba sus manecillas después de las 5 AM, y tuve que marcharme de ahí. Salí a las calles que alumbraba una luna llena del mes de abril — tal vez la última ¬¬—. Aún pensaba en ti, que como le hiciste para olvidarte tan rápido de mí, pensaba sin me extrañabas por lo menos un 10% de lo que yo a ti.

Llegué al parque del “Llano”, y me senté de nuevo, a esperar el camión, pero la gente me veía con asombro mientras con sus deportivas ropas se ejercitaban. Yo creo que aún lloraba —con reserva— una lágrima tras otra y así hasta que dejaron de escaparse de mis ojos. Pues una pregunta vino a sustituir las lágrimas, ¿Cómo olvidar?, como olvidar, si todo me recuerda a ti: un carro, una calle, un coche, un lugar, una risa, una voz, un libro, unas letras, un restaurante, una comida, una bebida, una lección, un cuento, un teléfono, un poema, una persona, un olor, una canción… muchas canciones tal vez, y en mi oído sonaba ya “… y aunque quiero olvidar, se me olvida que no puedo olvidarte…”.

Pero como se le hace para olvidar, como se le hace para que no duela el sentirse olvidada, como le hiciste tú para desaparecerme de tu vida, como le haces para no extrañar.

El crepúsculo apareció, y nunca había visto a la luna con tanta envidia como esa madrugada, la envidiaba porque ella te veía durmiendo, porque puede cuidarte desde ahí, porque tú la puedes ver y sabes que ahí esta, y a ella jamás la olvidarías, —envidié a la luna— por su mancha en forma de conejo que todos la admiran, por ser tan blanca y brillante, por ser tan inalcanzable, por ser única, y por que tú la quieres y le cantas, porque la admiras y la buscas.

Ahora no estoy en la Terminal del ADO, ni en el parque, ahora estoy aquí, jugando con mis muñecas, esperando de nuevo la noche para irme a casa de madrugada…

martes, 27 de abril de 2010

La noche de mi mal..

No quiero ni volver a oir tu nombre
no quiero ni saber a donde vas
así me lo dijiste aquella noche
aquella negra noche de mi mal.

Si yo te hubiera dicho no te vayas
que triste me esperaba el porvenir
si yo te hubiera dicho no,no me dejes
mi propio corazón se iba a reir.

Por eso fue que me viste tan tranquila
caminar serenamente bajo un cielo más que azul,
Despues ya vez, me aguante hasta donde pude,
terminé llorando a mares donde no me vieras tú.

José Alfredo J.

jueves, 22 de abril de 2010

Juicio de amor

JUICIO DE AMOR


Corto juicio se ha realizado
Sin pruebas ni alegatos,
Solo una sentencia que ordena
Devolver algo que nunca me han dado.


No recuerdo haber firmado
Un escrito, por tal precio
Pero es verdad que di un beso
Que a la ruina me ha llevado


Era yo actora en tal juicio
Y ahora soy la sentenciada
Inmediatamente apelé por tal injusticia
Sin tener de tí ninguna respuesta.


Elaboré un amparo,
Por violar mi derecho a ser oída
Pues tu articular en el oído
Se cerró de amor por ella.


Alegué eso ante el Juez de Distrito
Y parecía que había ganado
Pero apareció un falso testigo
Que tú mismo habías preparado.


Se presentó con el nombre de amor
Y me aplastó como cucaracha en tu cama
Y con eso el juez me negó
El amparo y protección por ingenua.


Publicaron por edictos mi remate
Y no tuviste piedad de mí
Me arrodille suplicándote clemencia
Pero ella fue más fuerte, que tu amor por mí.


La venta en almoneda habìa llegado
No habiendo postores, decidiste adjudicarme
Con desprecios y un precio elevado
Contigo tuve que quedarme.


Me llevaste a tú casa
Me archivaste en un rincón
Dejaste que el olvido me borrara
Y provocaste mi destrucción.


Ahí entendí que  era un juego
De las leyes del amor te habias burlado 
si te di besos, amor y caricias
para tì eso ya habia caducado.


Aunque el juicio ha terminado
Pienso volver a demandar
Esta vez ante el jurado de jurados
Y por una acción penal.


Te espero en los tribunales
Con las leyes que no conoces
Por intento de homicidio
Y ésta vez serás culpable!!!

autor. Gasave

lunes, 19 de abril de 2010

ORACION DE LA GESTALT

Yo soy Yo
Tú eres Tú.
Yo no estoy en este mundo para cumplir tus expectativas
Tú no estás en este mundo para cumplir las mías.
Tú eres Tú
Yo soy Yo.
Si en algún momento o en algún punto nos encontramos
Será maravilloso
Si no, no puede remediarse.
Falto de amor a Mí mismo
Cuando en el intento de complacerte me traiciono.
Falto de amor a Ti
Cuando intento que seas como yo quiero
En vez de aceptarte como realmente eres.
Tú eres Tú y Yo soy Yo.

( Fritz Perls )

viernes, 16 de abril de 2010

Y yo que no puedo...

… y yo que no puedo leer pero más o menos escribir. Escribo por que tampoco puedo hablar, pero para que hablar si todos al hablar mentimos, pues juzgamos las verdades por mentiras y las mentiras siempre creemos que son verdades. Y yo que no puedo mentir. ¿Y para que mentir? si a nadie le importa si puedo o no, si a nadie le importa si en el mapa aparezco. Puedo oír, pero para que oír si tendré que escuchar mentiras, además mi tonto oído se deja mandar por el corazón, que hace que tus mentiras de vuelvan verdades. Puedo ver, pero para que ver, si a mi nadie me ve, si mis ojos también se dejan mandar por el corazón, quien cree que puede mandar a todos. No puedo tocar, ni sentir, para mí eso esta prohibido.

Entonces ¿que hago aquí?, si no puedo leerte, más o menos escribirte, no puedo hablarte, no quiero oírte ni verte. Parece como si alguien se burla de mí, ¿el destino quizás?, ¿la suerte?, ¿la ignorancia?, puede ser.

Si ahora que soy nada en tu vida, y no tengo sentidos vivientes, que vago por los vivos y deseo estar con muertos, ¿que hago aquí? Si Juan de Dios Peza invocó—lo que quiero decir— “…me he sentido morir y aún estoy viva, tengo ansias de vivir, y ya estoy muerta”.

Y ahora me queda reír, cuando tengo ganas de llorar, porque tampoco puedo soñar, recuerda que te regale mis sueños, entonces me queda pensar, pensar que hago aquí, y aprender todas las cosas que aún no puedo hacer, por que soy una rosa que no esta marchita, haa pero que tonta soy, si las rosas pierden todo menos sus espinas. Y yo que ni espinas tengo, jamás haría daño, ni mis ojos, ni mi boca, ni mi tacto, podrían hacerte sentir algo.

Tal vez pueda huir, pero Sabina ya me lo advirtió “… Y cómo huir, cuando no quedan islas por naufragar…”. Entonces me dan ganas de dormir, y despertar cuando todo éste mejor, pues parece que cargo XX siglos en mí y apenas cumplí XXIII primaveras…

miércoles, 14 de abril de 2010

envio mis sueños...

Velas con olor a la esencia de Pachulí, sabanas blancas de seda, un cuarto de cuatro por cuatro, una ventada de lado izquierdo, un silbido de mar, sueño púes, con una noche perfecta que no vendrá, ya no te tengo y todo esta demás. Sueño: con besar tu pecho, acariciar tus cabellos, morir en tus besos, beber tu sudor, tocar el más intimo de tus secretos, y que me ames un día más—pero Sabina lo ha dicho— “…Hay mujeres atadas de manos y pies al olvido, hay mujeres que huyen perseguidas por su soledad…” y a mi me alcanzó mi soledad, me alcanzó la realidad.

El mar que no he conocido y me figuraba ver, viento con arena para tocar nuestras almas, yo, sentada en la playa juntito a tu cuerpo y amarte hasta el amanecer, ver de que lado sale el sol cuando estoy a tu lado y en dónde se hunde la luna para encontrarla después —sueño—jugar con tu boca, oír tus historias, solo tú, solo yo. Pero ya lo dijo Jaime Sabines, —solo en el otro mundo del sueño te consigo—.

He prometido no romper ninguno de mis sueños, pero éstos sueños que parecen figuras delirantes de un corazón moribundo, no puedo hacerlos realidad. Aún así no puedo ni quiero romperlos, no quiero perderlos, no quiero que nadie los toque, por eso te los dejo, quiero que los guardes, puedes usarlos si gustas a mi ya no me servirán, tal vez un día pregunte por ellos, tal vez un día llore por que los extrañaré, pero llévatelos yo te los regalo, es un regalo para ti. Yo los hice con el amor que te tengo, con la ilusión que sembraste en mí. No los rompas por favor, yo siempre estaré pensando que tú los guardarás —si un día llamo— tal vez estaré vieja y tal vez estaré sola, pero solo es para saber si aún los guardas o los hiciste realidad.

Hoy empiezo a construir nuevos sueños, que nunca serán igual que los que te acabo de dar, los mandé en una cajita de olvido, junto con un puño de palabras, y un beso que te entrego desde aquí. Espero los recibas y no los eches al olvido, yo en canje te prometo, rezar mucho para que te vaya bien, te prometo nunca olvidarte ni dejarte de amar.

lunes, 12 de abril de 2010

SI TU ME DICES VEN...





SIEMPRE HE PENSADO QUE HAY CANCIONES QUE DICEN MÀS QUE 1000 PALABRAS...

No he podido olvidarte... To Juliet

Maldito corazón que no puede borrarte, tengo en mi historia el más claro ejemplo que Neruda nos pudo haber dado —“es tan corto el amor, y tan largo el olvido”—, pues el haberte amado tres años, fue tan corto para mi, que parece que ayer fue cuando me dijeron que te habías casado y es que estos ocho malditos años no han podido borrar aquel amor.

No he podido borrar ni un detalle del amor que un día dijiste tenerme, y pero en verdad me sentí amada, y tú no puedes negar que me amaste, pues frenábamos a cada rato el impacto de tocarnos, teníamos muchos motivos para amarnos, pero siempre fui yo la que te pedía más tiempo. Mi adolescencia era un motivo suficiente, pues yo quería ser adulta cuando diera ese gran paso, pero tú no pudiste esperarme…

Tres años en que fui tan feliz, te regale tres años de mi vida, de mi tiempo, pero ahora míranos, tú estas casado y si quieres que lo admita yo no soy feliz, no me he vuelto a enamorar. Tú no pudiste esperarme un poco más de tiempo, te fuiste y no volví a ver a aquel hombre del que un día enamoré. Mi vida es vacía, he jugado con más de cinco bocas, he tocado a más de dos cuerpos y todo para olvidar, para borrar, para no recordar que en tres años te entregue mi vida, que estoy maldita por ti, por tu amor, que maldigo el verte con tu esposa. No dejaré de verte, porque somos la misma hierba de una sola tierra, una tierra donde “se unieron dos corazones con un mecate”, de esa tierra que nos vio amarnos, que nos vio pelearnos, y que nos vio separarnos, y ahora hasta parece que se ríe en cada fiesta anual, en todo Santos, Navidad, Semana Santa, cuando ahí esta tú, cuando ahí estoy yo.

Han pasado ocho años de olvido, y sigo sin olvidar, y se que tú también no me has olvidado, tu mirada me dice cuanto me extrañas, tus nervios frente a mi me hace suponer que aún me amas y puedo apostar mi vida que aún guardas aquella foto que un día me robaste, a la que un día tú le lloraste, la que traías en tu cartera y me enseñaste un domingo sin saber que sábado ya te habías casado.

Ahora puedo pedir algo, y no es el olvidarte, te pido ya no me busques, no intentes hablarme, ni mirarme, porque tengo una botella de tequila aunada con rencor con la que me he emborrachado muchas veces, con la que he llorado, gritado, maldecido tantas veces el haberte perdido.

No quiero que un día en el que ya no aguante más, te grite cuanto te odio, que te odio por haberte perdido, que odio porque te fuiste, que te odio porque no me he podido enamorar de nadie más que tú, te odio porque al tratar de olvidarte he cometido muchos errores, siiiii te odio por casarte, te odio porque en estos ocho años no he podido olvidarte…

sábado, 10 de abril de 2010

A QUIEN CORRESPONDA

A quien corresponda:

La que suscribe, de nombre cherizada, nacida en primavera, amada en invierno, me permito agradecer a quien corresponda, haber conocido unas de las cosas más bonitas de este mundo.

Que no existió vacío en mis noches locas, que si hubo errores no los tome en cuenta. A quien corresponda, he de agradecer por tocar mis labios, por besar mi espalda, que yo perdono, si tuviera que perdonar algo, y disculpe, si mis defectos son tan grandes como el amor que hoy siento.

A quien corresponda, yo perdono por no amarme, por no pensar en mi, y que agradezco por los segundos que se convirtieron en horas, por las horas que fueron días y por los días que ya han terminado. A quien corresponda, debo de decir que hoy no lloraría si él se fuera, que si tiene que viajar 10 horas para alejarse, yo tendría un corazón enamorado para recordarle, que existen Ángeles que no lloran cuando aman, que encontré un planeta en el que quisiera quedarme.

Que si de mis ojos brotan lagrimas, sería porque se quedára en el mismo planeta, pues existe un silencio con promesas rotas. Hoy he de agradecer por sus besos, pues el tocar sus labios me tiraba al suelo, y estando en sus brazos puede entender uno de mis vicios, y luego en un músculo de su pecho me hizo creer en varios sueños, que hoy agradezco a quien corresponda, todas las palabras y enseñanzas, y si ya esta lejos, agradezco de todas formas —a quien corresponda—, el traerme de vuelta a este planeta donde yo no correspondo.

Sin más por el momento me despido, y agradezco infinitamente si he podido servirle en algo, y disculpe los errores que se han cometido, y las molestias que se han causado, queda atentamente a sus pies... CHERIZADA.

viernes, 9 de abril de 2010

Muñecas de porcelanas

Mis niñas, mis muñecas, he agradecido por dejarme entrar a sus vidas, pero con tu permiso, claro ya me lo has dado GMG, voy a recordar, porque empecé a narrar EXILIADA. Recuerdo cuando nos sentaste en la fogata, dijiste ― vean las estrellas de un 27 de diciembre― estando las cinco en el suelo de “un haz de corazones”. Muy seria nos miraste, yo, como siempre de platicona, te dije: ya cuéntanos todo, ―replico JM―, quiero saber como se enamoraron, como se fusionaron. Tú muy tranquila dijiste, ella es ahora mi dulcinea, cuando era una muñeca de trapo, yo jugué a ser su infancia, todas dijimos: ¡¡¡coomooo!! ―así como escucharon― dijiste.
Recuerdo que ahí fue cuando empezaste a contarnos su historia, y en mi cabeza quedo un estigma de ese relato, que prometí narrar algún día. Ella, era una muñeca de trapo, que con el juego de palabras del estúpido Mario, había terminado con sus sueños, con su vida, con su alma, pero tú apareciste para levantarla. Dijiste que ella se llamo alguna vez EXILIADA, cualquiera, ramera, rogona etc., y te contó que quería volver a ser niña, que regresará su infancia a ella, Tú como siempre de cariñosa, le dijiste que tú eras la niña que ella había solicitado, pero ella contestó― yo no puedo mirarte, Mario me ha destrozado―, ella ya no soñaba con ser madre, con ser esposa, o la mujer de un hombre, ahí, ahí fue cuando empezaste a lloriquear, te controlaste y seguiste.
Tú llegaste en una noche y esperaste junto a ella el alba, dijiste que le contaste la pena y el dolor que traías arrastrando desde que tu padre te toco donde no debía y ahí fue cuando empezaron a jugar a ser niñas. Que se encerraron en su mundo a jugar a las muñecas de porcelana, que ahora se aman. Tu dulcinea, tu muñeca de porcelana, ahora es feliz a tu lado, ella ha regresado a la escuela, quiere ser abogada. Tú vistes atractiva y trabajas en una oficina, el mundo no se da cuenta de la hermosa historia, que no tienen que dar explicaciones a nadie, pues tu mamá no dijo nada cuando tu padre te violaba, que su familia de ella piensa que eres una buena amiga, pues pensaron que dulcinea no volvería a ser la misma desde que Mario la abandonó y ahora que tù estabas a su lado, ellos apoyaban la felicidad de las muñecas de porcelana.
Todas casi lloriqueando―dijimos― te apoyamos, ahí aprendí que hay heridas que se curan, que ahora que yo amo, puedo soñar con estar a su lado.
Gracias GMG, por esa bonita noche, por que los tequilas nunca me habían sabido tan buenos, beso, beso, gritamos todas, y esta historia aún no se ha terminado…

miércoles, 7 de abril de 2010

EXILIADA...

Vaya encuentro inhumano, en mi cabeza has solicitado te explique más de mil cosas, como si tuviéramos respuestas de sobra. Es cierto que he cambiado, que me dejaste con alma casi nueva, pero no sé con que cara debo mirarte, si quieres regresar, regresamos el pasado. Tengo que advertirte que no soy la misma, pero sueño con volver a mis 13 años, cuando jugábamos con muñecas y carritos y después a los enamorados. Es verdad yo lloraba, pero no recuerdo haberlo hecho como ahora, querréis mirarme, hazlo!!! Solo que mi vida ha cambiado.

Mi cuerpo ha cambiado, tal vez me verás más delgada, mi mirar es ahora abstracto, y mis labios parece que se han secado. De mi corazón mejor no hablamos, pero prometí decirte todo, en esta entrada que llevará mi sangre, lee y después lo conversamos.

No lloré cuando te fuiste, pues ni siquiera pude darme cuenta, andaba ilusionada con varias cosas que deje que te marcharas. Regresas ahora y no tengo nada que ofrecerte, tal vez sueños que viven en mi cabeza, pero no forman parte de éste mundo, ni auténtico planeta. Me he enamorado dos veces, con un par de versos entregue mi cuerpo despilfarró mi sueño de ser virgen, de ser esposa, madre y mujer de un solo hombre, ahora dice él que no puede amarme.

Recuerdas cuando dije que deslizaría en sus entrañas mi placer, soñaba con que él se quedará mucho más, pero ahora me he rebajado a sus metáforas creadoras, ante su verbo, ante sus versos, ante sus cuentos de palabras que tatúan su cariño en mi pensar, que tatúan su miseria de cariño en mi cuerpo, que han iluminado de ternura clandestina una mujer que parece una cualquiera.

Pero es que el amor es así, el amor tiene metáforas, sentimientos que emancipan la palabra, es por ese motivo que por ahora no puedo darte la cara, por que a la dulce niña la han matado. Déjame que me levante, prometo buscarte lo más rápido, ya se que siempre has estado a mi lado niña, niña, niña de hace 10 años…

Si Dios me regalará un trozo de vida...

Si por un instante Dios se olvidara
de que soy una marioneta de trapo
y me regalara un trozo de vida,
posiblemente no diría todo lo que pienso,
pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen,
sino por lo que significan.
Dormiría poco, soñaría más,
entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos,
perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen,
Despertaría cuando los demás duermen.
Escucharía cuando los demás hablan,
y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate.

Si Dios me obsequiara un trozo de vida,
Vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol,
dejando descubierto, no solamente mi cuerpo sino mi alma.
Dios mío, si yo tuviera un corazón,
escribiría mi odio sobre hielo,
y esperaría a que saliera el sol.
Pintaría con un sueño de Van Gogh
sobre las estrellas un poema de Benedetti,
y una canción de Serrat sería la serenata
que les ofrecería a la luna.
Regaría con lágrimas las rosas,
para sentir el dolor de sus espinas,
y el encarnado beso de sus pétalos...
Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida...
No dejaría pasar un solo día
sin decirle a la gente que quiero, que la quiero.
Convencería a cada mujer u hombre de que son mis favoritos
y viviría enamorado del amor.
A los hombres les probaría cuán equivocados están,
al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen,
sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
A un niño le daría alas,
pero le dejaría que él solo aprendiese a volar.

A los viejos les enseñaría que la muerte
no llega con la vejez sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres
He aprendido que todo el mundo quiere vivir
en la cima de la montaña,
Sin saber que la verdadera felicidad está
en la forma de subir la escarpada.

He aprendido que cuando un recién nacido
aprieta con su pequeño puño,
por vez primera, el dedo de su padre,
lo tiene atrapado por siempre.
He aprendido que un hombre
sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo,
cuando ha de ayudarle a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes,
pero realmente de mucho no habrán de servir,
porque cuando me guarden dentro de esa maleta,
infelizmente me estaré muriendo.

Del Maestro García Márquez

Si alguien llama a tu puerta, amiga mía,
y algo en tu sangre late y no reposa
y en su tallo de agua, temblorosa,
la fuente es una líquida armonía.

Si alguien llama a tu puerta y todavía
te sobra tiempo para ser hermosa
y cabe todo abril en una rosa
y por la rosa se desangra el día.

Si alguien llama a tu puerta una mañana
sonora de palomas y campanas
y aún crees en el dolor y en la poesía.

Si aún la vida es verdad y el verso existe.
Si alguien llama a tu puerta y estás triste,
abre, que es el amor, amiga mía.

martes, 6 de abril de 2010

te estarè esperando!!!

Él nos mira

El fin de semana pasado, para ser exactos el viernes dos de abril, se celebró para nosotros los católicos el Viernes Santo. Hubo una representación con jóvenes del pueblo del encuentro de Jesús y María, bueno también se realizó el Vía Crucis, pero lo que quiero contar es del sermón que dio el Señor cura, cuando se realizó el “encuentro”.

Primero, quiero que sepan que cuento esto porque me pareció muy importante, además porque los sermones del Señor cura de mi pueblo, no son como todos los demás. Él nos relató una historia que a mí me contó mi padre hace cinco años, y por eso me fascinó volver a escuchar y sobre todo, soy sincera, entendí el mensaje de otra manera.

El Señor cura nos dijo que para un mejor entendimiento, sobre como es el amor de Dios y como debemos encontrarnos nosotros con él, nos relató:

“Había una vez, dos hermanitos que deseban visitar a sus abuelos en unas vacaciones, entonces les pidieron a sus padres que los llevaran a ver a sus abuelos y los dejarán quedarse unos días con ellos. Los padres aceptaron, además porque les pareció una buena idea que sus hijos quisieran ir a visitar a sus abuelos.

Los abuelos vivían en un ranchito, lejos de la ciudad, y su casa era muy bonita, porque estaba en el campo, había: ríos, árboles, flores, bosque, campo, pajaritos, etc. Todo era muy bonito además que los abuelos, como muchos de nuestros abuelos, tenían sus animalitos, ya saben, gallinas, patos, caballos etc. Los abuelos cuando llegaron sus nietos que eran un niño y una niña, los recibieron con mucho cariño. El abuelo se llevó a su nieto a un cuarto que tenia afuera de la casa y donde guardaba cosas viejas, mientras la niña ayudaba a su abuela con la cena, el abuelo le dijo a su nieto —te voy a regalar algo que he conservado desde hace mucho tiempo— y sacó de una caja que tenía en el cuarto de cosas viejas, una resortera, el abuelo la había comprado desde hace mucho y esperaba un día como ese que sus nietos llegarán y pudiera regalársela para que jugaran en el campo.

El niño emocionado con su resortera, al día siguiente, se puso a practicar su “tino”, pero él no le pegaba a nada. Siguió practicado varios días, hasta que en una ocasión, jugando con la resortera, le pegó a un pato de su abuelita, y lo peor era que ese pato era el consentido de la abuelita. Cuando se acercó al pato, el pato estaba muerto, y cuando se dio cuenta, su hermanita lo había visto, pero ella solo se rió y se metió a la casa de sus abuelitos. El niño asustado por lo que había hecho, escondió al pato y tiró la resortera.

En la cena, la abuelita les dijo que quien de sus nietecitos la ayudaría a lavar los trastes, la niña dijo: — mi hermanito tiene ganas de lavar los trastes abuelita—, y acercándosele en el oído del niño le dijo, “acuérdate del pato hee”, y pues el niño aceptó lavar los trastes. A día siguiente la abuelita nuevamente dijo que quien de los niños la acompañaría a la ciudad a comparar las cosas de la comida y la niña nuevamente replicó: —mi hermanito que dijo que él quería ir a la ciudad—, se acercaba a su oído del niño y le decía “acuérdate del pato hee”,y así por varios días la niña chantajeaba al niño, pero un día el niño molesto y enfadado por lo que su hermana le hacia, fue con la abuelita y llorando le dijo: “abuelita, yo maté a tu pato, perdóname, pero fue un accidente, no te enojes conmigo, yo se que lo querías mucho, perdóname abuelita”, la abuelita con una sonrisa le dijo “ yo ya sabia que habías matado al pato, te vi por la ventana, y ya te había perdonado, si es verdad que quería a mi pato, pero te quiero más a ti, solo quería ver hasta cuando ibas a dejar que tu hermanita te chantajeara, cuando me ibas a decirme tu la verdad”.

El señor cura nos dijo que así es Dios, él nos ve por la ventana del cielo, él sabe todo lo que hacemos, y nos perdona siempre, desde antes que nosotros vayamos a él a confesarle nuestro arrepentimiento, solo que él nos espera, siempre espera a que nosotros vayamos y le digamos, “Señor, hice esto o aquello, pero perdóname, me arrepiento ya no quiero seguir siendo chantajeado por el mal, ya me cansé de vivir este sufrimiento”, Dios ya nos ha perdonado, pero él quiere que nosotros le digamos nuestros males, tristezas, penas, pecados, angustias, Dios ya las sabe, pero nada más, esta viendo como nos dejamos chantajear por el mal.

Yo, Señor sabes que no te ocultó nada y que no dejó que el mal me chantajee, Yo amo a mi Dios, a mi familia, a mis amigos y a TI.


jueves, 1 de abril de 2010

los peces en el estanque!!

Hace tiempo leí una historia de los japoneses y sus pescados, y admitiré que no le di mucha importancia, a esa lectura. Me encontraba, bueno mejor dicho, no sé como me encontraba, simplemente recuerdo que no me importo y pensé que era una de esas lecturas tontas de superación personal.

Ahora que he cambiado de trabajo, de amores, de amigos, etc. recordé esa lectura, porque a pesar de cambiar varias cosas de mi vida que me hacen sentirme mejor, no siento que haya alcanzado el éxito, o que sea muy feliz, simplemente me siento muy tranquila, pero alerta.

Por eso quiero compartir esa lectura (que redactaré a mi manera, claro esta), porque me gustaría que puedan aplicarla a su vida y no es difícil, nada difícil, púes yo sin darme cuenta la aplicó y ahora la recuerdo siempre que veo tiburones…

Los japoneses, gustaban mucho de los pescados, pero en las aguas que ellos tenían hace mucho que no había peces, es por eso que se vieron en la necesidad de crear barcos fuertes y resistentes para que fueran mar adentro y así pescar peces.

Por lo que las empresas o compañías que se dedicaban al comercio del pescado, cuando tuvieron sus barcos, se disponían de varios días para ir de pesca, y cuando regresaban, sus pescados ya no estaban frescos, y a las personas que se los vendían, —ellas¬— les argumentaban que no sabían igual.

Entonces las compañías, tuvieron que mejorar su servicio. Se les ocurrió llevar congeladores y una vez que pescaba, metían a los pescados a los congeladores para que se conservaran frescos durante el camino de regreso.

Pero después tuvieron el problema que no era lo mismo un pescado fresco que congelado, entonces crearon los barcos tanque. Dentro del barco llevaban tanques de agua, para que cuando atraparan a los peces, los metían de inmediato a los estanques, y así se conservaran frescos hasta que regresaran a los puertos.

Sin embargo, los peces dejaban de moverse, aunque seguían vivos, y eso hacia que no estuvieran frescos.

Y aquí es donde quiero hacer un paréntesis mientras piensen que harían ustedes para mantener los peces frescos…

El caso es que las personas, cuando tenemos algo mejor, o que creemos que hemos mejorado en nuestra vida, por ejemplo, mejor trabajo, mejor casa, mejor coche etc… creemos que tenemos éxito, sin embargo no debe ser así, siempre debemos de tratar de buscar cosas nuevas, no dejarnos de mover como los peces en los estanques, debemos estar siempre frescos, si creemos que estamos bien en el estanque y que no necesitamos más, que así somos felices, y por eso estamos muy tranquilos sin movernos en el estanque, debemos hacer lo que hicieron los japoneses…

Los japoneses, para mantener a sus peces frescos, metieron en el estanque un pequeño tiburón, que hacia que los peces estuvieran vivos, muy vivos, y aunque el tiburón se comía uno que otro pez no importaba porque llegaban vivos y frescos los demás.

Y eso es lo que pasa con nuestra vida, siempre nos encontraremos a uno que otro tiburón en el estanque y si no nos movemos nos comerá, pero si nunca dejamos de movernos, siempre nos mantendremos frescos y vivos…

Así que recuerden, que a veces ya hay tiburones en nuestro estanque y sino ya vendrán, no dejen de moverse para estar frescos….


LinkWithin

Related Posts with Thumbnails